martes, 29 de septiembre de 2009

Recuerdos del Colegio....


El otro día tuve que ir a recoger a mi sobrino al colegio. Y me quedé
alucinado. ¿Se han fijado en cómo salen los niños de la escuela? Es algo
espeluznante. Salen despavoridos, corriendo en cualquier dirección, como
endemoniados, empujándose y gritando... como huyendo de algo, que piensas:
¿qué les harán ahí dentro?
Yo recuerdo que de pequeño no salía del colegio de esa forma tan violenta.
Francamente, yo la mayoría de las veces... ni entraba. A mí me decían:
- Enriquito: si quieres ser un hombre de provecho, vas a tener que
estudiar un poco más. Y yo les decía:



· Vale, pero si no quiero
serlo, ¿puedo seguir como hasta ahora? Pero a
ellos les da igual, te cargan con un mochilón...
¡así de grande!, y te dicen que todo eso te lo
tienes que meter en la cabeza...¡Pero qué empeño
en meterme cosas en la cabeza! ¿No se dan cuenta
de que no cabe?. Además, en el colegio se aprenden
muchas cosas inútiles.


· Por ejemplo: ¿para qué
se tiran tres meses enseñándote a diseccionar una
rana?... Coño, ¡que te enseñen a pelar una gamba!


· ¿Y las matemáticas?
Para empezar, te enseñan los conjuntos: estaban
los conjuntos conjuntos y los conjuntos disjuntos.
Muy bien, me ha sido muy útil en mi vida saber
esto.


· Ahora, el que cambió mi
vida fue el conjunto vacío: le enseñaba las notas
a mi madre y ella me decía:
- Enriquito, ¿y este cero en matemáticas...?
- Mamá, no seas antigua, esto no es un cero, es un
conjunto vacío.

Luego te enseñan a sumar, restar, multiplicar,
dividir.. Y dices: 'Ahora me enseñarán a pedir un
crédito en el banco...' Pero no. Lo que te enseñan
es la raíz cuadrada... ¡Ay, amigos! ¡Qué gran tema
la raíz cuadrada! ¡Lo bien que me ha venido a mí
saber calcular la raíz cuadrada...! Sin ir más
lejos la he usado... nunca. Francamente, ¿a
ustedes no les parece que ha llegado el momento de
plantear este asunto al Gobierno? La raíz cuadrada
tendría que ser voluntaria, como la mili.


· Y luego llegaba el
profesor y decía:
- Chicos, os voy a poner unos problemas.


· Pues... cojonudo: Llevo una
mochila de ocho kilos, me llaman Carabesugo, me roban el
bocadillo... ¡Y encima viene este tío a ponerme más
problemas!



Y dictaba:
- Si Pedrito tiene seis manzanas, viene su hermana y le
quita dos, viene su primo y le quita otras dos y luego
el perro se come una... ¿Cuántas manzanas tiene Pedrito?
Pues no lo sé, pero, francamente, si quiere mi
opinión... Pedrito es gilipollas.


· ? Otra cosa que te enseñaban era el
latín y el griego, las lenguas muertas... ¿A ustedes les
parece bien que les enseñen lenguas muertas a los niños? ¡Con
razón por la noche no pueden dormir!


· ¿Y la sinalefa? ¡Eso tiene que ser
una guarrada! Yo me negué a estudiarla.... Y hablando de
cochinadas: también te enseñaban los gases nobles... Mire
usted, a mí me parece muy bien que los nobles se tiren sus
gases como todo el mundo, ¿pero es necesario estudiarlos?


· La clase de música... Muy bien, en
casa no te dejan gritar ni jugar al balón en el pasillo, pero
puedes soplar la flauta hasta que se te salgan los higadillos.
Y tu madre ni mu... Total para aprender a tocar 'Debajo un
botón, ton, ton...'


· Por no hablar de la clase de gimnasia...
¿De qué te va a servir en la vida saber dar una voltereta? ¿Y saltar
el potro? ¿Se imaginan que en un debate entre Aznar y Zapatero
Aznar dijese: 'Señor Zapatero, usted va a subir las pensiones y va a
bajar la gasolina, pero, ¿sabe saltar el potro...? Déjese de
demagogias... Salte el potro señor Zapatero, salte el potro'


· La única vez que yo estuve atento en el
colegio fue cuando explicaron la reproducción humana. Aunque tampoco
me sirvió de mucho: primero te hablaban de un guisante... después de
unas abejas que salían de su colmena y llevaban el polen por ahí.. Y
luego te enseñaban unos dibujitos de una pareja en pelotas.... Que
yo pensaba: ¿Y aquí quién de los dos tiene el guisante...?'


· Pero ahí no se acababa el follón, porque
yo sabía que había una cosa que se metía en algún sitio... Y además
estaba la cigüeña..... Con lo que me fui a mi casa pensando que la
reproducción humana consistía en que una cigüeña metía un guisante
en una colmena y una abeja lo esparcía... Muy bien... Yo no quiero
molestar, pero entonces. ¿para qué me sirve a mí la polla?


· En fin, amigos, que según lo que nos
enseñaban en la escuela, un hombre de provecho es un tío que habla
lenguas muertas, come guisantes, da volteretas y toca la flauta... ¡
Coño, este tío es Kung Fu!

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